viernes, 9 de agosto de 2013
Sobre escribir
Quienes llevan años de conocerme saben que me gusta escribir, no sé si lo hago bien o mal, pero en ocasiones logro tener éxito con la idea que quiero dar a entender simplemente porque escribo lo que pienso con un alto grado de ironía y sarcasmo.
Pero no todo lo que he escrito tiene ese tono, sería patético nada más poder expresar palabras de esa forma. Por ejemplo, pocos podían creer que fuera capaz de escribir un documento gubernamental o un comunicado de prensa para determinada institución, cosa que también he realizado en antiguos trabajos. De igual manera, escribí un libro que me costó un poco más de trabajo, ya que ahí definitivamente no podía colocar ningún juicio de valor u opinión sobre algún hecho histórico, al final el resultado fue bueno.
Para llegar al punto principal, resulta que me entrevisté con un tipo de Conacyt. La idea es que le administrara su página y atendiera sus cuentas en redes sociales, cosa que ya he hecho en otras ocasiones. Pero el tipo quería que le explicara mi metodología para escribir, reconociendo que él no tenía la mínima idea de como funciona el proceso. Por supuesto le expliqué a grandes razgos que hacía, sin embargo se empeñaba en que fuera más específico, así que saqué una hoja y un lápiz y le dibujé un pequeño esquema, sin embargo, él no estaba satisfecho, quería que le dijera como es que empiezo a escribir, cómo llegan las ideas para que él pudiera comprender qué era lo que yo haría a diario.
Por supuesto no le dije nada y salí de ahí con la molestia de toparme con pared en el gobierno. Ya una vez un académico me dijo que si no me mostraba una metodología positivista no podría ingresar a la UNAM, ahora me topé con un wey que seguro que estudió redes o algo relacionado con matemáticas y que requiere de esquemas y diagramas de flujo para entender algo que no se puede explicar.
No quiero decir que lo que hago sea difícil o maravilloso, pero no puedo simplemente llegar a un trabajo, esperar que den las 9 y entonces empezar a teclear palabras hasta que den las 6. Escribir no es así, necesitas imaginación (cosa que el tipejo no conoce), necesitas improvisar (cosa que definitivamente nunca ha hecho el tipejo), necesitas tomar riesgos y apostar por el producto que estas haciendo (no un manual de instrucciones que se ve que esta persona es lo que acostumbra leer siempre). Ya había salido del lugar cuando inicié mi reflexión, quería volver y decirle que la vida no es así, que no debe haber manuales para todo y que si uno no se despierta pensando en qué será lo que aprenderé hoy, esta desperdiciando el tiempo.
Ángel Caído