Se ha ido mi jefa, vaya que me hizo sufrir, vaya que pensé que nunca sucedería. La realidad es que no se merecía el cargo, por mucho tiempo se aprovecho de mi trabajo para hacerse famosa, eso sin mencionar los actos de corrupción que hacía. Ahora sí, espero las cosas cambien y tengamos por lo menos la tranquilidad mental que nos quitó.