Ser testigo de cómo un niño pierde su
cabello debido a una enfermedad no es una experiencia nada agradable. Pero, aun
a sabiendas de que miles de niños pierden su cabellera diariamente debido al
cáncer, ¿Cuántas personas tienen la valentía de ayudar donando su propio pelo?
Una niña de
tan solo tres años resultó un
ejemplo para muchos adultos. Luego de visitar a niñas que luchaban contra
el cáncer, Emily James no tuvo inconveniente alguno en
recortar su larga cabellera para donarla, fue el propio tío de la pequeña quien
realizó el corte, e incluso la muñeca de Emily adquirió un nuevo look.
Los cabellos
fueron enviados a una organización que, de forma gratuita, fabrica pelucas para
niños en tratamiento de quimioterapia. Toda la acción de la pequeña fue
registrada por sus padres que poseen una productora de filmes. La pequeña se
quedó con un cabello corto, pero con un
corazón inmensamente grande.
“Sabía
que Emily se iba a robar el show, como siempre. Lo publicamos en los medios
sociales. Nuestras familiares lo compartieron. Nuestros amigos lo compartieron.
Y miles de personas lo han compartido también. No estábamos preparados para
esta repercusión“, dijo Amy James, la madre de la chica.
De un modo
sencillo, la niña explica por qué decidió llevar a cabo esta buena acción. “A
veces, los niños se enfermen y sus cabellos se caen. Esto es muy, muy triste“,
dice en el video. “Quiero darles mi pelo, porque tengo más y más pelo.”
“Nos
vimos inundados con comentarios sobre la ternura de Emily, su compasión,
inspiración, los valiosos comentarios sobre su tío Maffew y las muchas
emociones que evoca en las personas. Nos agradan los elogios, pero sentimos que
lo importante es decir que ella es como cualquier niña de tres años“, dijo
Amy.