Me encuentro en la disyuntiva, dedicarme a la enseñanza al 100% lo que implica la satisfacción de enseñarle a jóvenes algo que en el 90% de los casos lo terminarán olvidando o seguir trabajando en alguna empresa que me explotará medianamente pero con un salario muy decoroso y por tanto que me haga olvidar de todos los problemas.
Tengo este fin de semana para pensar qué hacer.
Lo que si me choca es ese momento en que tienes trabajo y todos te buscan, ¿por qué no me buscaban cuando no tenía trabajo?