¿Por eso te irás de aquí, por qué los demás se
quedaron?
A lo mejor había algo interesante allá afuera y
los que nos ofrecen cosas aquí todavía no se dan cuenta. Hay que salirse una
vez. Aunque no sea hacia un mejor sitio, pero hay que irse de aquí, no hay de
otra. Porque un gran poder es el de comparar, viendo más de lo mismo pero con
otro estilo uno puede ver si el camino tomado es en verdad el que tenía que ser
tomado. Ahí empieza una decisión, para poder descubrir hay que ver, hay que
convercerse de la opción y no sólo admitir lo de los demás. Por eso dónde tiene
que estar la pregunta no es en qué decisiones toman, sino en que las tomen por
ellos. Suelen pensar muchas opciones pero nadie se las calla hasta el último
momento, cuando quiere elegir algo diferente entonces comienza la gran fuerza
que les dice que no. Deberán convencerse. Hay que tomar acciones libremente y
para eso hay que estar seguros de la decisión.