lunes, 25 de febrero de 2019

Enchufe



El amor histórico

Dicen que el amor es ciego y la locura le acompaña, este dicho puede aplicarse bien al ilícito amor de Concepción y Pedro.

Concepción García vivía en la Hacienda de la Estanzuela, muy cercana a la ciudad de Monterrey, casada con Antonio Sánchez había formado una familia, sin embargo llevaba desde hace algún tiempo una relación extramarital con Pedro Montes.

Cansados de vivir un amor a escondidas, Concepción y Pedro planearon como deshacerse de Antonio, soñaban con casarse.

La noche del 10 de octubre de 1853 cuando Antonio dormía tranquilamente, descansando de las fatigas del día, Pedro entró al domicilio con ayuda de Concepción, con un palo en mano le propinó 3 certeros golpes en la cabeza que lo privaron de la vida.

Rápidamente ocultaron el cadáver, aunque para el infortunio de ambos el delito fue descubierto meses más tarde, no quedándoles más remedio que confesar el hecho.
A pesar de que sus abogados solicitaron el indulto, este les fue negado por el gobierno del estado, siendo condenados a muerte.

A las 10 de la mañana del 26 de enero de 1854 fueron conducidos a la plaza del Mesón (hoy calles Hidalgo y Garibaldi) recibiendo antes los auxilios espirituales. Una descarga de fusil terminó con las vidas de Concepción de 40 años de edad y Pedro de 20 y con ellas su amor, un amor envuelto en pecado y sellado con sangre.

viernes, 22 de febrero de 2019

Actualización


En el trabajo la suerte les sonría a mis jefas, han logrado aplazar una fecha peligrosa. Solo es aplazar, no podrán no hacer nada cuando el destino los alcance. Adicional a eso en la oficina se siente una anarquía total.

lunes, 18 de febrero de 2019

viernes, 15 de febrero de 2019

Trabajo


Es bastante frustrante que mi jefa con doctorado tenga nulos conocimientos de su puesto. Es frustrante que le tenga que hacer el trabajo duro y al final del día yo sea el que me vaya en metro con un sueldo miserable.

viernes, 8 de febrero de 2019

lunes, 4 de febrero de 2019

Enchufe



Bleach

Si tuviera alas,
volaría por ti.

Incluso si toda la inmensidad de esta tierra
se hundiera bajo el agua.

Si tuviera una  espada
pelearía por ti.

incluso si toda la inmensidad de este cielo
te atravesara con su luz.

viernes, 1 de febrero de 2019

Visitas


Dentro de las cosas que uno puede identificar en mi es que no me gusta recibir visitas en la casa. Podré en ocasiones ceder un poco, pero esas personas que te visitan por más de 3 horas deberían terminar en la horca. Uno tiene cosas que hacer, como masturbarse o llorar en la soledad de su casa.