lunes, 2 de enero de 2017

Amar por el resto de la vida

Nunca hay un instante en el que se puede decir “supe que lo amaría por el resto de mi vida”. Eso es payasada de películas de Estados Unidos.

Cuando tienes setenta y siete años y ves al pedazo de pellejo que está a tu lado, sólo aciertas a decir “es un misterio por qué sigo aquí”.

Algunos conocen el amor aniquilante y pasional.

Otros pasan la vida en relaciones sedentarias y con eso pueden decir “he amado”.