sábado, 30 de enero de 2016

Que asco de vida

La semana pasada, le dije a mi follamigo que le daría clases esa tarde pero no pude y le dije que estudiaría toda la noche con él. Se cabreó y me ha bloqueado de todas las redes sociales. Pero eso sí, quiere seguir follando. No entiendo nada.

Hoy, una amiga es vegana y siempre que nos juntamos o exige que le hagan un menú especial o se lleva su propia comida, lo cual nunca nos molestó. Hoy organizó una reunión en su casa y nos ha echado porque llevamos sándwiches de jamón y queso para comer entre nosotros.

Hace unos meses, a causa de una tuberosis mamaria me realicé un aumento de busto. Todos me apoyaron, mi esposo, mi suegra, mis hermanas, mi madre. Además de que lo pagamos con nuestros ahorros... mi compañera de trabajo no deja de decirme que ese dinero mejor lo hubiera donado a la caridad, que soy una persona egoísta y superficial, además de gritar a todo pulmón que me agrandé las tetas.

La semana pasada, tuve el valor de hablar a un chico que me pone mucho y con el que nunca había hablado antes. Al principio hablando de cosas triviales me preguntó literalmente si me gustaba chuparla. Me quedé a cuadros y le pregunte que por qué me preguntaba eso. Me dijo: "A ver, si no la chupas no merece la pena seguir hablando". Le dije que sí inconscientemente y ahora me siento muy sucia.

Hace unos meses, por cuestiones de salud me colocaron una sonda por donde filtraba liquido. Para evitar las miradas y preguntas incómodas decidí cubrirla con una bolsa de tela que colgaba a mi costado. Trataron de robármela en más de una ocasión.

Ayer, comencé a trabajar en una tienda de ropa de mujer. Una de mis primeras clientas fue una señora que al decirle que no teníamos su talla se enfadó y se fue. Estuvo toda la tarde mirándonos desde la puerta sin irse. Hoy también está. Tengo miedo.

Ayer, iba andando por la calle contentísimo porque después de dos años con unas muy roñosas, estrenaba deportivas nuevas (totalmente blancas). Vi un charco y para no pisarlo decidí dar un saltito y evitarlo. Al aterrizar me resbalé y caí en una mierda de cara. Eso sí, las bambas impolutas.