lunes, 25 de enero de 2016

Tu sonrisa sigue viva

Cosa difícil que te hayas ido, las pequeñas cosas me recuerdan que exististe en mi vida, que te vi sonreír un millón de veces, que saltaste y caíste, que viviste. Cosa rara como la vida acaba así tan de la nada y no lo podemos evitar. Ya no estás para abrazarme pero todos los días me das lecciones nuevas, me enseñas a saltar sin miedo, a sonreír en la lluvia, a ser feliz cada segundo porque no sé si habrá siguiente. Todos los días existes en las flores que veo, en el infinito placer de haberte conocido, en tu canción favorita, en el recuerdo de tu voz, en las palabras de tu madre, en la cara de tu hermana, en los amigos compartidos, en los años, en lo que falta, en lo que fue, en lo que nunca será y en todas las ganas que tengo de decirte una vez más: GRACIAS.