sábado, 26 de marzo de 2016

Que asco de vida

La semana pasada, me llamó por teléfono "una amiga". El motivo era pedirme que por si acaso no contara nada de su vida privada a un chico que conocí el día de antes y que ella conoce también ya que según ella "somos amigas" y debe haber fidelidad. Llevaba 7 años sin saber nada de ella.

Hace tiempo, cuando conocí a mi novia, en lo primero que me fijé de ella fue en su larga y preciosa melena rizada y pelirroja. Aunque toda la vida lo ha tenido larguísimo lleva un tiempo quejándose de que le agobia el pelo. El otro día me dijo muy en serio que se iba a rapar al 3. La quiero, pero ya de por sí es muy masculina y me da miedo que lo haga y deje de parecerme tan atractiva.

Hoy, he roto un espejo, aunque nunca he creído en esas cosas de la mala suerte. Justo después, cuando iba a tirar los trozos, he pisado una mierda. Espero que las suertes se contraresten.

La semana pasada, mi antivirus consideró que el contenido de la página de la facultad es peligroso y no me dejó entrar. Estaba en pleno parcial.

Hoy, tuve que usar el ordenador de mi hermana. Cuando terminé, encontré una larga lista de películas, entre ellas "Vampire Girl vs. Frankenstein Girl". Cuando la abrí comprendí por qué la tenía. Es la película más rara que he visto en mi vida. Ari, casi prefiero que veas porno.

Hace unos meses, mi madre al parecer cree que soy un semental nato y cada vez que me ha visto con una amiga me ha comprado condones. Se me están acumulando y no tengo con quién darles salida.

Hace unos meses, estaba jugando un torneo de fútbol con mis amigos. En cierto momento del partido tiraron un centro y yo, sin pensarlo, hice la chilena de mi vida. Terminó en gol, pero al caer me fracturé la columna vertebral. No sabía si alegrarme por el gol o si llorar por mi columna.

Hace unos meses, que vivo en Alemania y hace uno que empecé a trabajar en un almacén. Un trabajo sencillo ya que tengo un nivel de alemán de A2. Saben que no hablo, me cuesta entender las órdenes y a veces me equivoco, pero no me han tratado mejor en toda mi vida laboral española.

Hoy, mi sobrina de 8 años se ha dado cuenta que las salchichas están hechas de carne y se ha ido al baño a vomitarlas. Cuando le pregunté por qué había hecho eso, mes respondió que se había vuelto vegetariana porque le daban pena los animales. Yo con ocho años jamás pensé tanto en nada.