domingo, 30 de diciembre de 2012

Fin de año

Según la manera en que ustedes miden el tiempo se ha terminado un año. Por consiguiente, en estos tiempos de reflexionar, a mi nada más me queda agradecer. Agradecer es reconocer la deuda de gratitud que adquirimos por actos que nos benefician, que promueven nuestro “estar-bien”. A cada uno de ustedes debo algo de mi bien-estar pasado y presente. No es posible agradecer aquí con nombre y apellido a cada uno de los que me han honrado con su ayuda, comentarios y presencia. Sólo cabe un inmenso abrazo verbal que los abarque a todos y los haga sentir cuánto los aprecio y respeto. Y como se agradece no sólo con palabras sino con hechos, expreso ahora las primeras y confío contar con un "todavía" lo suficientemente largo como para  que éstos den testimonio de la veracidad de aquéllas.

Feliz próximo año y mucha suerte.