miércoles, 6 de diciembre de 2006

Inicio de la decadencia


Supongo que mi incapacidad para relacionarme con los humanos o mi lejanía hacia los seres que dicen apreciarme me obliga a comunicarme por este medio. La mayoría de las veces se me ha culpado por mi distanciamiento basándose principalmente en mi negativa a cargar con un teléfono móvil o mi incapacidad para regresar las llamadas. Sin embargo, Diana me ha propuesto realizar este blog, bajo la idea de que puedo decirle algo a la gente. Aunque no creo que tenga nada que decir, me arriesgaré a crear este blog con la esperanza de que no sea otro de los proyectos que dejo a la deriva y que nunca terminaré.

Sean bienvenidos.

Salud.


Angel Caido