Ayer simplemente dejé de trabajar alrededor de las cinco para probar el nuevo navegador de Google. A las ocho de la noche recordé que tenía un texto pendiente, maldito navegador, es muy bueno. Me quedé sumergido en su estilo y todo lo adicional que me deja hacer. Hace años mandé muy lejos al navegador de Microsoft, simplemente no me ayudaba en mis exigencias. FireFox sigue siendo mi consentido por el uso de temas y las cosas adicionales que le he puesto al navegador. Chrome definitivamente es más rápido al momento de cargar, tiene un modelo simplista, la interfaz para descarga de archivos es más cómoda, comprende tus gustos y la manera en como trabajas. Cuando Chrome deje de ser versión beta nadie lo detendrá. Así que festejé haciendo unos cambios en éste bonito blog, incluyendo el contenido de las entradas.
Hasta el momento parece ser que soy el único que extraña el color rosita que tenía.