jueves, 22 de diciembre de 2011

Sobre Dios


Si todas las reglas de la lógica y la moral fueron establecidas mediante un decreto arbitrario de la voluntad divina y no contienen una verdad intrínseca, no hay razón para creer que Dios está limitado por sus propias reglas. En otras palabras, su bondad y su sabiduría no tienen porque asemejarse a lo que nosotros consideramos bondad y sabiduría en nuestro mundo tal y como él lo construyó.