martes, 18 de septiembre de 2007

La caida


Mis relaciones con las mujeres eran naturales, sueltas, fáciles, como suele decirse. Las amaba, según la expresión consagrada, lo cual es lo mismo que decir que nunca amé a ninguna. La misoginia me parecía vulgar y tonta, de manera que siempre juzgué mejores que yo a casi todas las mujeres que conocí. Sin embargo, al colocarlas tan alto lo más frecuente era que las utilizara en lugar de servirlas.

Camus.