jueves, 12 de abril de 2007

Reminiscencia


No podía dejar de amarla porque el olvido no existe

y la memoria es modificación, de manera que sin querer

amaba las distintas formas bajo las cuales ella aparecía

en sucesivas transformaciones y tenía nostalgias de todos los lugares

en los cuales jamás habíamos estado, y la deseaba en los parques

donde nunca la deseé y moría de reminiscencias por las cosas

que ya no conoceríamos y eran violentas e inolvidables

como las pocas cosas que habíamos conocido.


Cristina Peri Rossi