viernes, 28 de diciembre de 2007

Nada

SI PENSABAN QUE IBA A PONER ALGO REFERENTE AL DÍA DE LOS INOCENTES. PUES NO. NADA SE ME OCURRIÓ.

Molestas criaturas


No hay día que no se queje el Señor Director de Cultura, un escritor

de tremendo prestigio, por la cantidad de mendigos que distraen su

atención cada mañana al tocar a su puerta, reclamando algo que

comer, impidiendo así, que el pueda concentrarse para concluir su

novela sobre la miseria humana.



Amnesia


Hace más de cinco años que no me acuerdo de usted, ya olvidé

el sabor naranja de sus labios, la frescura de sus manos, el aroma a

vanilla de su piel. Hace mucho que no pienso en usted, no obstante, mi

gato lleva su nombre; es más, ni siquiera marco su teléfono, aunque

siga comprando la lotería con ese número.



De suerte


Era tanta su flojera de sentarse a dar seguimiento a la novela que tenía

escribiendo por cinco años, que inventó el cuento breve.





Aceptación


Se levanto con rapidez para abrir la puerta, que según

él alguien tocaba a las cinco de la mañana. Como

no encontró a nadie fuera de casa, caminó hasta la

esquina, luego a la iglesia, el mercado, el metro, el banco,

al café donde solía ir y no vio a nadie. Regresó

a casa pensando que tal vez no había sido su ennovia

la que tocaba la puerta.



Horticultura


Ayer paso a verme mi suegra después de ir al

supermercado, desde que me case con su hijo hace

un año, nunca ha hablado bien de mi, sin embargo

me trajo un regalo, busque una linda maceta y lo sembré.



El domingo siguiente nos hizo una visita y al ver su

regalo en el centro de la mesa, espeto: ¿ves por qué

digo que no sabes nada de cocina?, lo que te regalé

un fue un Brócoli, no un Bonsái.