lunes, 12 de octubre de 2009

Mis inicios en el trabajo para los pueblos indígenas (2a parte)


Mis inicios en el trabajo para los pueblos indígenas (2ª parte)

 

Estimados todos y todas, pues después de un largo receso de no tratar el tema de mi inicio en el indigenismo, quiero retomar este día, 12 de octubre, ese camino y no precisamente por conmemorarse 517 años del ¿Descubrimiento de América?, sino porque era la temática principal de mis participaciones para, después entrar de lleno a la cultura.

 

En la última entrega les comentaba que en enero de 2003 me incorporé oficialmente a la plantilla del INI como "Coordinador de proyectos" y tuve a mi cargo la revisión, análisis, seguimiento y evaluación del Programa en 8 estados de la República, con lo que iniciaron mis primeros contactos con la cultura indígena. Mi primera comisión oficial la hice al Estado de México, a los Municipios de San Felipe del Progreso, San José del Rincón y El oro, todos ellos atendidos por el Centro Coordinador de la CDI en Atlacomulco. En esta visita realizamos una evaluación a diversos proyectos que se apoyaron en el ejercicio fiscal 2001 y 2002. Ésta consistía en entrevistar al responsable del proyecto, a los secretarios y tesoreros, a los integrantes de la Contraloría Social y a pobladores de la comunidad beneficiada. Además, solicitábamos revisar los expedientes de los beneficiarios, así como la revisión física de los bienes que se habían adquirido, para lo cual levantábamos testimonios fotográficos.

 

Dicha evaluación duro tres días y me permitió, 1) recorrer varios caminos y conocer varias comunidades y 2) escuchar de viva voz la importancia que para los creadores de cultura tiene ésta en todos los ámbitos de su vida cotidiana, lo cual hasta el momento era totalmente desconocido para mí.

 

Este tipo de evaluaciones las seguí realizando en Tabasco, Yucatán, Michoacán, Sonora, Puebla, Oaxaca y Quintana Roo y cada vez más comencé a comprender la importancia de la cultura, pues, a diferencia de la mayoría de los mexicanos, si ellos no siguen llevando a cabo ciertas tradiciones, mitos y rituales, se puede ver seriamente afectada su relación con la naturaleza, sus cosechas, sus siembras, la paz y tranquilidad de la comunidad, entre otras cosas. En cambio, si nosotros dejamos de ir al cine, al teatro, de disfrutar de un ballet, etc., no pasa absolutamente nada, si acaso tal vez sólo nos hayamos perdido de un gran espectáculo, pero nada más.

 

Saludos a todos y todas y nos vemos la próxima

 

Maximus





Tu vida, tus amigos y lo que te interesa está en Perfil de Windows Live. Actualízalo.